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El Valle no se detiene

lunes, 3 de junio de 2013

Gerardo Quintana Medina, Profesor de Matemáticas gratamente recordado en El Cerrito.

Gerardo Quintana Medina, quien fuera rector de los colegios “Jorge Isaacs” y Centro Nocturno “Presbítero Francisco Campo” de El Cerrito, es recordado por sus alumnos como un excelente profesor de Matemáticas, que los motivó para encariñarse de esta área que muchos consideran difícil y llevó, a varios de ellos, a profesionalizarse en carreras afines a las Matemáticas, especialmente en las Ingenierías. Hijo adoptivo de El Cerrito, en donde vive desde el año 1955, inició labores docentes en 1959 en la Escuela “Pedro Antonio Molina” ;  en el año lectivo 1960- 1961 fue Director de la Escuela “José Ignacio Rengifo” ; y en 1962  se posesionó como profesor del Colegio “Jorge Isaacs”.
También fue profesor del Colegio “Sagrado Corazón”.
Su esposa, también docente, fue Rubelia Rojas Agudelo, que murió en diciembre de 1996. De este matrimonio hay cuatro hijos, todos profesionales: Paulo, Hernando, Claudia María y Adriana. Su Padre, Hernando Quintana, también fue docente y ocupó durante mucho tiempo el cargo de Supervisor Escolar en varios municipios del Valle.
El aprecio y el agradecimiento de quienes recibieron sus clases sigue vigente, no obstante que se retiró de la docencia en 1991. Pero el mismo Quintana, Bachiller del Colegio Académico de Cartago, Normalista de la Escuela Normal Departamental para Varones de Cali y Profesor de Matemáticas y Física graduado de la Universidad Santiago de Cali, afirma que su éxito como catedrático de los números, resultó, más que de su formación académica, de su facilidad innata para transmitir los conocimientos, de su cabal cumplimiento en la preparación de las clases, de su costumbre de motivar haciendo notar las curiosidades de las Matemáticas, de su utilización permanente de material didáctico adecuado, de su interés por facilitar el conocimiento de los temas con ejemplos apropiados, y de su empeño para repetir y repetir los conceptos, así fueran complejos o elementales y de los últimos o primeros grados, pues dice que aprendió del notable Pedagogo colombiano Agustín Nieto Caballero  que “la repetición es la madre de la ciencia”.
Si estaba orientando una clase en el grado once, no tenía inconveniente en recordar conceptos del grado sexto o de la primaria, si éstos eran necesarios para entender el nuevo tema, dice el Profesor Quintana. Y agrega: Además, nunca me contenté con enunciar fórmulas o teoremas: Siempre orientaba a los alumnos para que dedujeran las fórmulas y demostraran los teoremas. Ha recibido múltiples reconocimientos por su tarea, pero afirma, sin falsa modestia, que está muy lejos de merecerlos. Considera que éstos son sólo muestras de generosidad de los funcionarios o de los directivos de las entidades que se los hicieron.

                                                                                             Comunicaciones Federación Colombiana de Municipios

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